El predominio de la teoría neoclásica durante las últimas décadas ha dejado apartadas a un lado las teorías alternativas que dan explicación a los fenómenos que la teoría convencional no ha sido capaz de explicar.
Desde el surgimiento de las primeras hipótesis expuestas por Gabriel Tarde, hasta la actualidad con la idea del “pequeño empujón” de Richard Thaler, su desarrollo ha ido incrementándose al no poder la teoría predominante explicar ciertas conductas humanas ante las diferentes maneras de actuar en la toma de decisiones económicas de los individuos.
Es por ello por lo que su evolución es importante para poder entender de forma más completa la teoría económica, dado que aún las teorías económicas basadas en factores psicológicos no han adquirido la importancia que merecen y, además, no se enseña a los estudiantes como una teoría alternativa, sino que simplemente no se menciona.
