Lo insólito en la novela Don Juan de Gonzalo Torrente Ballester: un nuevo concepto del mítico personaje y su lucha por la libertad

Abstract

Torrente Ballester propone una original relectura del mito con un Tenorio privado de una oportunidad de arrepentirse así como de la condena en el Infierno. Acompañado de un Leporello (diablo encarnado), lleva más de tres siglos recorriendo países, entablando amistades con artistas que, como Baudelaire, le dedicaron obras, sin entender su tragedia. En el París de mediados del siglo veinte actúa en montajes de obras donjuanescas por teatros independientes y visita cafés donde jóvenes sartristas discuten con pasión. A veces su alma abandona el cuerpo atractivo en que ha de pasar una eternidad y se instala en el de un intelectual español para escribir con su mano la “verdadera” historia de Tenorio, aclarando su conflicto con Dios, en que la cuestión de la libertad del hombre de decidir su destino es una de las fundamentales. Defendiendo su derecho a condenarse desafía a Dios escogiendo el pecado. Se cree capaz de hacer frente a Dios como su igual, pero este es indiferente a sus blasfemias y Don Juan ha de permanecer eternamente un ser incapaz de satisfacer sus deseos, convertido en su propio infierno.